El té de melocotón es un té muy versátil: puede refrescarte en verano y calentarte en invierno (si se prepara sin hielo). Puedes utilizar cualquier tipo de té que tengas en casa, ya sea de hojas sueltas o en bolsitas, negro o verde. La base de melocotón puede prepararse con antelación y guardarse en el frigorífico. Recomiendo servirlo en un vaso alto con una rodaja de limón.
Preparar el té de hoja suelta con antelación y dejar enfriar para que se infusione. Yo he utilizado té negro, pero el té verde también sirve.
Cortar los melocotones en rodajas y ponerlos en una batidora con 2 tipos de azúcar (80 g o unas 6 cucharadas cada uno) y 1 taza de agua fría. Licuar hasta obtener una mezcla homogénea.
Vierta la mezcla de melocotón en un cazo y llévela a ebullición a fuego medio. Cuando rompa a hervir, bajar el fuego y cocer a fuego lento durante unos 10 minutos, hasta que la mezcla de melocotón esté oscura y como un sirope.
Retire la mezcla de melocotón del fuego y deje que se enfríe un poco. Si lo desea, puede pasarla por un colador para eliminar los grumos grandes.
Empieza a preparar el té de melocotón. Llena un vaso con hielo. A continuación, añade un poco de la mezcla de melocotón enfriada (yo añadí unas 3-5 cucharadas) y vierte el té por encima. Adorna con una rodaja de limón y otra de melocotón.
¡Disfruta de tu té de melocotón casero! Guarda la pulpa de melocotón sobrante en la nevera en un recipiente tapado.
Comentarios